Las tolvas cumplen en el sector industrial una importante función, al servir para disolver o distribuir materiales sólidos y líquidos a través hacia un conducto. De diversa capacidad, las tolvas sirven como almacenaje y, gracias a su forma de embudo en su parte final, como correcto suministro de material.
A diferencia de un silo, la tolva suele tener un tamaño inferior, ya que no está diseñado para almacenar material o suministro durante tanto tiempo, además de que suele ser un elemento que se puede mover de un lado a otro. En este artículo, precisamente queremos profundizar en los usos de las tolvas, así como los sectores en los que se utilizan.
Por ejemplo, en Metalistería V3 estamos especializados en tolvas de productos agrícolas, para equipos incineradores o como sistema de depuración de aguas sucias. Aquí, te explicamos más sobre las tolvas que fabricamos.
Según el objetivo, la forma de conducir los materiales que almacena o el material del que está compuesto, podemos encontrar diferentes tipos de tolvas, vamos a verlo a continuación.
En primer lugar, hay que pensar en la manera en la que se descargan los materiales. En este sentido, el canal de flujo es determinante. Lo más habitual, en este sentido, es que diferenciemos entre dos tipos: tolvas de flujo tubular y tolvas de flujo másico.
Las tolvas de flujo tubular suelen tener una forma cónica o cilíndrica. Su canal de flujo, alineado con la compuerta inferior de la tolva. Gracias a su forma, el desgaste de las paredes de la tolva sufre un menor desgaste, a l no haber apenas rozamiento entre el material de descarga y el propio conducto.
Sin embargo, el problema que puede tener es que disponga de zonas muerta con material acumulado y que, en caso de que sea un material perecedero, podría caducar al quedarse retenido en la propia tolva.
Por otro lado, podemos encontrar las tolvas de flujo másico, las cuales son de apertura cuadrada o chaflanada. El canal de flujo másico permite que el material esté en movimiento todo el rato, haciendo que se produzca un deslizamiento permanente, permitiendo que todo tipo de material se aproveche en el vaciado.
La ventaja principal, efectivamente, es que no hay obstrucciones en el flujo ni espacios muertos. Por eso, si el material almacenado es perecedero, como por ejemplo los alimentos, este tipo de tolva es mucho más adecuada. Por el contrario, hay que considerar que este tipo de tolvas se desgastan antes.
En total, podríamos decir que una tolva puede tener hasta 3 funciones distintas y que, para ello, deben de tener una serie de características. Las funcione que puede desempeñar una tolva son las de alimentación, dosificación o almacenamiento.
Las tolvas de alimentación, por ejemplo, se utilizan principalmente para la alimentación de animales en las fases de destete y engorde de los mismos. Son tolvas regulables en su carga , generalmente de un tamaño menor que otras tolvas y equipadas con un elemento de succión de alimento.
Asimismo, podemos encontrar tolvas destinadas al almacenamiento de productos a granel, las cuales suelen ser de un tamaño mayor a otras tolvas y que protegen el material de agentes externos, como la humedad o el polvo.
Por último, encontramos las tolvas dosificadoras son de gran utilidad en el sector agroalimentario o industrial, al ser un elemento regulable dentro del proceso de fabricación. Asimismo, suele incorporar al final algún tipo de herramienta copara poder triturar, moler o triturar el material.
Las tolvas, dadas sus funciones, tienen que estar fabricadas con materiales de lo más resistentes. En este caso, los materiales que se suelen utilizar son el polietileno, ligero e higiénico, así como materiales de gran dureza y flexibilidad, como el acero al carbón y, cómo no, el acero inoxidable, el cual cumple a la perfección todos los requisitos de resistencia, durabilidad e higiene que necesita una tolva de calidad.